sábado, 28 de abril de 2007

The dog in the night-time

He held up his right hand and spread his fingers out in a fan. I held up my left hand and spread my fingers out in a fan and we made our fingers and thumbs touch each other.

We do this because sometimes he wants to give me a hug, but I do not like hugging people so we do this instead, and it means that he loves me.

viernes, 27 de abril de 2007

Johnny

- Es posible que la rata sea real y Ella sea un sueño. ¿Cómo podré saberlo?
- Lo que hay que hacer es gritar. A veces a mi también me pasa. Sueño que alguien me busca y quiere matarme, y que mi padre y mi madre huyen conmigo a Egipto. Oigo el ruido de los soldados persiguiéndonos... y entonces grito. Grito con fuerza. Y el grito me despierta. Entonces sé que ha sido un sueño. Así que lo que tienes que hacer es... gritar.
- Pero es que no puedo gritar... ¡ni siquiera puedo susurrar!
- Susurrar no te serviría de nada... Otra solución es decirte a ti mismo: espera un momento. Esto es una pesadilla y tengo que despertar para que termine. Haces un esfuerzo para abrir los ojos y el sueño se desvanece.
- No puedo abrirlos, porque no tengo ojos.
- Bueno... eso complica las cosas... En ese caso te conviene autodisciplinarte antes de dormir. Decirte a ti mismo: "me voy a dormir. Y no voy a tener pesadillas." Se puede hacer, ¿sabes? Con práctica. Te vas sintiendo adormecer...
- No me siento adormecer. No tengo nada para sentirme adormecer.
- ¿Nada? (...) Bien. Hay que enfocar el asunto de otra forma. Distinta. Empezaremos dando por hecho que TODO es un sueño, lo cual en el fondo es cierto: cuando estamos despiertos tenemos un tipo de sueños y dormidos tenemos otros. La diferencia está en que los del día los controlamos, y los de la noche nos dominan. No tienen control. Piénsalo bien: cuando soñaste lo de la rata... ¿controlaste el sueño, o te dominó el sueño a ti?
- El sueño a mí.
- Si, exacto. Si hubiera existido la rata, la habrías espantado ¿no?
- ¡Desde luego!
- El hecho de que no la espantaras demuestra que todo fue un sueño.
- ¡Sí, sí! ¡La ... ! ...... No me sirve... Aunque hubiera sido real no la podía espantar, porque no tengo brazos.
- No tienes brazos...
- No tengo nada.
- Esto es una pesadilla peor que tus sueños. Sería cruel fingir que alguien puede ayudarte. Tú lo que necesitas es un milagro.
- ¡No, un milagro no! ¡Dime que la rata era real y que lo que me pasa es un sueño!
- Me parece que sería mejor que te fueras. Tienes muy mala suerte y no tengo palabras.
- Sí, sí... pero antes dime una cosa: ¿tú y yo estamos aquí en realidad, o es también un sueño?
- Es un sueño.
- ¡¡¿Cómo lo sabes?!!
- Porque yo soy un sueño.
-¡No te creo!
- Nadie me cree... Por eso soy tan irreal como todos los demás sueños que no se han realizado.

Cerrar.

- Maestro, hay una piedra en mi espalda. Por favor, quítemela.
- ¿Te atormenta?
- Sí, Maestro.
- ¿Acaso no se lo hiciste al pez?
- Sí, Maestro.
- ¿Acaso no se lo hiciste a la rana?
- Sí, Maestro.
- ¿Acaso no se lo hiciste a la serpiente?
- Sí, Maestro.
- ¡Levanta! ¡Camina!
- No puedo andar, es demasiado pesada.
- ¿Cómo crees que el pez, la rana y la serpiente la aguantaron?
- No debí hacerlo.
- Ve y encuentra a todos los animales y libérales de las piedras. Entonces te liberaré a ti. Pero si alguno de los animales, el pez, la rana o la serpiente está muerto... cargarás la piedra en tu corazón para el resto de tu vida.